Maduro denunció así la puesta en marcha de una misión naval norteamericana en el Pacífico y el Caribe, según el Pentágono para combatir el narcotráfico, y que Venezuela denuncia como un “bloqueo naval” en toda regla para asfixiar al país. El propio Maduro ha sido acusado de “narcoterrorismo” por Estados Unidos.
“El Gobierno de Trump, instrumentalizando una vez más las instituciones para alcanzar sus objetivos electorales, y basándose en las infamias bajo el pretexto de la lucha contra las drogas, ha ordenado el despliegue militar más grande de Estados Unidos hacia nuestra región en 30 años, con el fin de amenazar a Venezuela y de llevar a nuestra región a un conflicto bélico, sangriento y de duración indefinida”, escribió Maduro en la carta abierta.
El presidente de Venezuela aseguró que ha sido acusado “sin mostrar prueba alguna” del cargo de “narcoterrorismo” a pesar de que el propio Departamento de Defensa de EE.UU., asegura el mandatario, “demuestra que Venezuela no es un país de tránsito primario de drogas, como sí son aliados de Washington como Colombia y Honduras”, según la carta, con fecha de 3 de marzo, y publicada en su cuenta de Twitter.
Así las cosas, Maduro describió la operación como “una cortina de humo para ocultar el errático e improvisado” manejo de la pandemia de coronavirus en su país, donde han muerto ya más de 8.500 personas y los contagios superan ya los 325.000.
Por todo ello, Maduro hizo un llamado al pueblo de Estados Unidos “para que pongan freno a esta locura, para que responsabilice a sus gobernantes y les obligue a enfocar su atención y sus recursos en la atención urgente de la pandemia”.
“No somos tan diferentes”, concluye Maduro, “como nos quieren hacer creer con infamias. Somos pueblos buscando una sociedad más justa, libre y compasiva. No dejemos que los intereses particulares de minorías cegadas por la ambición no separen”.